Esta es una breve recopilación de refranes, brindis, poemas y sabiduría popular, en la que aparece la bota de vino.
"...¡Oh bota que vas colgando del arzón de la silla, por si o por no, eres tan devota mia y te quiero tanto que te prodigo mil besos y mil abrazos, te elevo a las nubes con miedo que recojas el agua!...".
"...Pero lo que más campeó en el campo de aquel banquete fueron seis botas de vino, que cada uno sacó la suya de su alforja: hasta el buen Ricote, que se había transformado de morisco en alemán o en tudesco, sacó la suya, que en grandeza podía competir con las cinco...".
"...Sancho caminaba muy despacio sobre su jumento, y de cuando en cuando empinaba la bota con tanto gusto que le pudiera envidiar el más regalado bodegonero de Málaga...".
"...Sancho callaba y comía bellotas, y visitaba muy a menudo el segundo zaque (odre pequeño) que, porque se enfriase el vino, le tenía colgado de un alcornoque...".